Las bendiciones de la graduación
Graduarse de Seminario o de Instituto significa más que simplemente recibir un diploma. Representa un estudio sistemático del Evangelio que puede ayudar a los alumnos a establecer un fundamento para toda la vida sobre los principios del Evangelio.
En el video a continuación, el hermano Chad Webb analiza algunas de las formas en que la graduación bendice a los alumnos y ayuda a cumplir con el objetivo de Seminarios e Institutos de Religión. Al mirarlo, los invitamos a reflexionar sobre las formas en que graduarse ha bendecido a sus alumnos y cómo ustedes los han ayudado a ellos, a los padres de ellos y a sus líderes del sacerdocio a comprender el “por qué” detrás de la graduación.
TAREA:
¿Qué ha hecho para ayudar a sus alumnos y padres de los alumnos a comprender la importancia de la graduación de seminario e instituto?
¿Cómo ayudara a los alumnos a que se preparen para su graduación, tanto a los que salen este año como los que se graduaran en los siguientes años?
Romelia Benavente Molina
ResponderEliminarMuchos pensamos que al graduarse de seminario ya se cumplió la meta, peto realmente, los maestros nos olvidamos de seguir apoyando a los alumnos y padres.
Seminario es el cimiento para lograr llegar a comprender los principios del evangelio, y la esperanza de llegar a la exaltación por medio del sacrificio expiatorio de nuestro señor Jesucristo.
Al leer los 4 libros canónicos el maestro está inculcando el amor por la lectura de las escrituras.y llegar a entender el propósito de la expiación de nuestro señor Jesucristo.
En las escrituras encontramos las promesas que Dios tiene preparadas para quienes sigan el camino que Jesús nos enseñó para regresar a su presencia, mediante nuestra obediencia, fe, y cumplimientos a los mandamientos My ordenanzas del evangelio
Merlin Carina Gómez Garavito de Guzmán.
ResponderEliminarCómo maestros de seminario somos responsables de darle continuidad a los jóvenes, el aprendizaje de los jóvenes no termina con la graduación debemos de está pendientes de ellos y sus padres.
Cuando ayudamos a nuestros jóvenes a leer los libros canónicos les estamos ayudando a que ellos formen su cimiento espiritual, cuando les enseñamos a nuestros jóvenes a encontrar principios y doctrinas en los libros y les ayudamos a que esté conocimiento llegue a su corazón ellos podrán saber que por medio de Jesucristo y su expiación van a poder llegar a la vida eterna