Habilidad:

Hacer una pausa, reflexionar y responder preguntas que nos hacemos que fomenten un espíritu cristiano de discernimiento, amor y empatía en nuestras interacciones.

Estas capacitaciones incluirán:

  1. Identificar la premisa de un alumno al hacer una pausa, reflexionar y responder a preguntas que nos hacemos tanto durante la preparación de la lección como al centrarnos en los comentarios o preguntas de los alumnos durante la clase.
  2. Procurar aclarar y entender la verdadera intención de las preguntas, los sentimientos y las creencias de un alumno.
  3. Ayudar a los alumnos a examinar o reformular sus premisas con una perspectiva eterna.

Definir

Cada alumno llega a clase con diferentes experiencias y relaciones en la vida que dan forma a su manera de pensar y a lo que sienten en cuanto a las verdades del Evangelio. Estos puntos de vista crean un punto de partida, a menudo llamado premisa, en el pensamiento de una persona. Comprender la premisa de una persona puede ayudarnos a enseñar la verdad con empatía y amor, como lo hace Jesucristo. Las diferentes premisas no cambian la doctrina; más bien, nos permiten ver la perspectiva de otra persona de una manera que ayuda a aumentar nuestra comprensión de las necesidades de cada alumno para, a su vez, aumentar la fe en Jesucristo.

Durante la preparación de la lección, los maestros pueden considerar las verdades eternas al hacer una pausa, reflexionar y responder a las siguientes preguntas:

  • ¿Cómo podrían las experiencias y las relaciones de mis alumnos dar forma a su manera de pensar, a lo que sienten en cuanto a estas verdades y al modo en que las viven?

  • Al estudiar esta verdad, ¿podría alguno de mis alumnos sentirse excluido, preocupado o dolido debido a sus circunstancias?

Al centrarse en el comentario o la pregunta de un alumno durante la clase o en una conversación, los maestros pueden hacerse las siguientes preguntas:

  • “¿Qué experiencias y relaciones podría tener este alumno que lo hagan pensar de manera diferente a la mía?”.

  • “¿Qué más debo saber para comprender plenamente por qué piensa de ese modo?”.

Estas preguntas pueden invitar al Espíritu Santo y fomentar un espíritu cristiano de discernimiento, amor y empatía en nuestras interacciones. También pueden ayudarnos a evitar reaccionar ante los alumnos de manera indiferente, crítica o defensiva. Pueden ayudarnos a enseñar la verdad de una manera que pueda bendecir a la clase y ayudar a los demás a edificar la fe en Jesucristo.

Modelo

Mientras preparo una lección acerca  del matrimonio eterno, reflexiono sobre estas preguntas: “¿Cómo podrían las experiencias y las relaciones de mis alumnos dar forma a su manera de pensar, a lo que sienten en cuanto a estas verdades y al modo en que las viven?” y “Al estudiar esta verdad, ¿podría alguno de mis alumnos tener dificultades con ella o sentirse excluido, preocupado o dolido porque sus circunstancias no son ideales en relación con esta doctrina?”.

Luego respondo: “Quizás tenga alumnos que sientan que no es importante porque sus padres se divorciaron. Tal vez tenga algunos alumnos que sientan que no son dignos de alcanzar un matrimonio eterno. Puede que haya ocasiones en las que mis alumnos no estén seguros del que el matrimonio eterno sea importante. Podría haber alumnos que estén cansados de escuchar relatos de otras personas acerca de como han sido bendecidos por medio de un matrimonio eterno

Practicar

En un análisis sobre el matrimonio eterno, una alumna pregunta: “¿Cuándo va a poner al día la Iglesia sus normas sobre el matrimonio con respecto al resto del mundo?”.

  • Piense en silencio: “¿Qué experiencias y relaciones podría tener esta alumna que la hagan pensar de manera diferente a la mía?” y “¿Qué más debo saber para entender plenamente por qué piensa de ese modo?”.

en la sección de respuestas de esta micro capacitación o por medio de mensaje directo a su coordinador escriba las posibles respuestas a las dos preguntas anteriores

el hacerse esas preguntas y encontrar respuestas durante el desarrollo de la clase o la preparación de la misma, permitirá que usted pueda ayudar a sus alumno de una manera mas personalizada y de la manera en la que Jesucristo los ve individualmente 

Incorporar

Elija una de las prácticas anteriores para centrarse en ella durante las próximas dos semanas. Planifique cómo continuará practicando estas habilidades. Por ejemplo:

  • Con cada verdad que prepare, puede tomarse cinco minutos para hacer una pausa, reflexionar y responder a las preguntas que lo ayuden a identificar la premisa de un alumno.
  • Antes de la clase, escoja a un alumno y piense en un comentario o pregunta que pueda tener en cuanto a cada verdad. Luego piense en silencio: “¿Qué experiencias y relaciones podría tener este alumno que lo hagan pensar de manera diferente a la mía?” y “¿Qué más debo saber para comprender plenamente por qué piensa de ese modo?”. Esto le preparará para hacerlo así durante la clase a medida que se centre en los comentarios y las preguntas de los alumnos.

¿Desea saber más?

  • Chad H Webb, “Empatía” (transmisión de la capacitación anual de SeI, 26 de enero de 2021), broadcasts.ChurchofJesusChrist.org
  • Jean B. Bingham, “Enseñar la verdad con el lenguaje del amor” (transmisión de la capacitación anual de SeI, 26 de enero de 2021), broadcasts.ChurchofJesusChrist.org

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